Voy a tomar chicha de caña.
Voy a tomar chicha de caña.
Mi cuñada, tráigame chicha,
yo no tengo chicha fuerte,
tráigame de su misma cuya y después se va a emborrachar.
Yo no soy mujer cubea,
yo soy de etnia Kakua,
si no tuviera esposo cubeo
yo no podría cantar así
Este día es día de ustedes,
digo a mi hija María Inés.
Hoy es día de ustedes,
tienen que estar bien contentos,
ir a participar.
En este día, cuando van a la fiesta,
los viejos entran muy contentos a la maloca.
Así decía a mi hija:
yo no soy nieta de cubeo,
yo soy nieta de kakua.
Digo a mi hija María Inés:
¿y por qué habla esas palabras?
Yo no soy cubea
mamá, me dijo mi hija,
yo no soy cubea, dijo mi hija;
me lo dice mi hija,
no me van a alcanzar,
usted va a quedar así.
Así dijo mi hija.
Mi papá también tiene,
él me mantiene bien.
Mi papá no mantiene bien a mi mamá,
me lo dice mi hija.
La chicha no es para jugar,
los que toman chicha,
no es para jugar, es fuerte,
dijo mi hija María Inés.
Tráiganme, tráiganme chicha.

La cuya es el totumo donde se sirve la chicha.