Según uno de sus relatos de origen, los Embera descienden de una semilla de chontaduro que sembraron los primeros seres. Algunos también dicen que antiguamente se les llamaba bembera, que en su lengua quiere decir "gente del maíz", pues embera significa 'gente' y be, 'maíz'. 
Los Embera Chamí aprecian tanto el maíz, que cuando celebran la fiesta que convierte a una niña en mujer que puede conseguir esposo y formar una familia, sus padres mandan a hacer para ella un chokó: un cántaro de barro con la forma de una persona, de un antepasado. El chokó guardará en su barriga la bebida de este cereal hasta fermentarla y convertirla en la chicha de maíz que todos disfrutarán. Cuando ella se case, llevará ese chokó a su hogar y así como este llevó la chicha ella llevará a sus hijos.