En sus huertas cultivan sus alimentos y lo que venden para comprar aquello que necesitan y no producen. Algunas personas trabajan para el Estado, el cabildo o entidades no gubernamentales. Otras son jornaleras, es decir que trabajan en las tierras de otros, fuera del resguardo.


En la tierra comunal pastorean los animales (vacas y ovejas) y cultivan alimentos de manera colectiva; es decir que los “comuneros” hacen mingas: se reúnen a trabajar y las ganancias son para toda la comunidad.